Luego de recorrer la totalidad del tramo conocido como “Las Escalerillas” que forma parte del Capac Ñam o el Gran Camino Inca en la sierra liberteña, el conocido consultor en turismo, Iván La Riva Vegazzo recomendó que éste sea incluido dentro de la oferta turística de La Libertad.
Con justa razón quienes lo han transitado opinan que éste tramo, que se ubica entre las provincias de Sánchez Carrión y Santiago de Chuco, constituye “la cúspide más alta y espectacular de la ruta entre Quito y Cuzco”; dijo La Riva Vegazzo; quien recientemente lo recorrió desde la laguna de Cushuro (3.989 m.s.n.m.) a las faldas del majestuoso pico Huaylillas (4.970 m.s.n.m.), el más alto del nororiente peruano.
El tramo en mención se lo puede recorrer en un día, pues tiene una longitud aproximada de seis kilómetros de largo con muchos tramos planos y otros de subidas y bajadas con cerca de dos mil peldaños alargados, cortos y continuos, que cruzan tres abras o portachuelos, todos sobre los 4.200 metros de altitud; lo que lo convierte en un recurso turístico-arqueológico propio para trekking fuerte, inusual en esta parte de La Libertad. Además es uno de los mejor conservados del Perú ya que no fue usado por los españoles ante la dificultad de cruzarlo a caballo, hecho que ha permitido su mejor conservación.
La travesía, muy emocionante por cierto, podría iniciarse desde la carretera que va a Sitabamba y que pasa por la zona para terminar, al otro extremo, en la laguna de Cushuro; previa señalización, servicio de arrieros y guías, tareas que ha de ser responsabilidad de los gobiernos locales, sector privado y el INC; recomendó.
La Riva Vegazzo, agradeció el apoyo de quienes colaboraron con la expedición, en especial el restaurante Big Ben, Transportes Fuentes, Hostal Huamachuco y la Municipalidad de Sánchez Carrión, hecho que demuestra que hay voluntad de apoyo al turismo regional, finalizó diciendo La Riva Vegazzo.
Con justa razón quienes lo han transitado opinan que éste tramo, que se ubica entre las provincias de Sánchez Carrión y Santiago de Chuco, constituye “la cúspide más alta y espectacular de la ruta entre Quito y Cuzco”; dijo La Riva Vegazzo; quien recientemente lo recorrió desde la laguna de Cushuro (3.989 m.s.n.m.) a las faldas del majestuoso pico Huaylillas (4.970 m.s.n.m.), el más alto del nororiente peruano.
El tramo en mención se lo puede recorrer en un día, pues tiene una longitud aproximada de seis kilómetros de largo con muchos tramos planos y otros de subidas y bajadas con cerca de dos mil peldaños alargados, cortos y continuos, que cruzan tres abras o portachuelos, todos sobre los 4.200 metros de altitud; lo que lo convierte en un recurso turístico-arqueológico propio para trekking fuerte, inusual en esta parte de La Libertad. Además es uno de los mejor conservados del Perú ya que no fue usado por los españoles ante la dificultad de cruzarlo a caballo, hecho que ha permitido su mejor conservación.
La travesía, muy emocionante por cierto, podría iniciarse desde la carretera que va a Sitabamba y que pasa por la zona para terminar, al otro extremo, en la laguna de Cushuro; previa señalización, servicio de arrieros y guías, tareas que ha de ser responsabilidad de los gobiernos locales, sector privado y el INC; recomendó.
La Riva Vegazzo, agradeció el apoyo de quienes colaboraron con la expedición, en especial el restaurante Big Ben, Transportes Fuentes, Hostal Huamachuco y la Municipalidad de Sánchez Carrión, hecho que demuestra que hay voluntad de apoyo al turismo regional, finalizó diciendo La Riva Vegazzo.
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