miércoles, 5 de mayo de 2010

Exigen respetar derechos fundamentales en zonas de conflicto

Lima (CNR) -- La represión del delito es una medida comprensible; sin embargo, ésta toda acción debe aplicarse respetando los derechos fundamentales de las personas, indicó el director de la Asociación Paz y Esperanza, German Vargas.
A través de CNR, Vargas Farías comentó las denuncias de los pobladores de Mendoza, en la margen izquierda del río Huallaga (Huánuco) respecto a que policías que buscaban al denominado "camarada Artemio" habrían incendiado once viviendas, además de torturar a dos personas.
Al respecto, invocó al gobierno y a las autoridades pertinentes a iniciar una profunda investigación del caso, y determinar las sanciones correspondientes de confirmarse las denuncias de los lugareños.
“En principio, esperar que el Estado tenga en cuenta que, cuando se dice que se protege a la sociedad, no se debe afectar los derechos fundamentales de las personas, sus derechos humanos”, refirió.
Vargas lamentó que, tras los hechos sucedidos durante la violencia política, donde tanto las huestes terroristas como miembros de las Fuerzas Armadas cometieron excesos con la población campesina, estas prácticas se repitan dos décadas más tarde.

“Siempre hemos creído que hay dos recursos suficientes para evitar caer en esas prácticas que nos remontan a lo sucedido hace algunos años, y que lamentablemente parecen que algunos añoran. Esperamos que eso no se vuelva a repetir”, aseveró.
Cabe indicar que los agentes policiales enviados para ubicar al "camarada Artemio" en el área rural de Aucayacu, capital del distrito de José Crespo y Castillo (Huánuco) habrían cometido una serie de abusos contra civiles, incluyendo la quema de once viviendas.
Pierre Marzo Rodríguez, comisionado de la Defensoría del Pueblo en Huánuco, recogió el testimonio de los pobladores del sector de Mendoza, ubicado en la margen izquierda del río Huallaga, colindante con Alto Corvina, escenario de la emboscada terrorista que cobró la vida de tres personas el 27 de abril.
Además de las casas incendiadas, dos parientes de Aurelio Niño Ambrosio (25), cuyo cadáver fue ubicado el último sábado en las inmediaciones del río Pucayacu, habrían sido sometidos a torturas la madrugada del 28 de abril.

0 comentarios: