Trujillo; La Libertad.- Es el título de la conferencia que la Arqueóloga francesa, Laure Lodeho ofreció en las instalaciones de la Alianza Francesa el pasado miércoles 23 de Junio.Especialista de las civilizaciones de América latina, principalmente de la cultura Chupicauro (centro México) y de las primeras poblaciones del Norte del Perú, la Doctora en pre historia por la Universidad de Paris, Laure Lodeho, explicó los métodos de investigación aplicados sobre los restos encontrados.
El estudio de su tesis la realiza a través de las “industrias líticas” de los primero pobladores del norte del Perú; para lo cual abarca un amplio espacio entre la costa del Pacífico y la vertiente oriental de los Andes. Por el sur abarca desde el Rìo Santa hasta la frontera ecuatoriana por el norte; es importante señalar que en toda esta zona los sitios pre cerámicos son muy pocos y están repartidos y estudiados de manera muy desigual. Entre los más conocidos tenemos en la costa: las zonas de Cupisnique, Jequetepeque, y Amotape más al norte. En los Andes, cerca de la ciudad de Cajamarca tenemos la zona de Yanacocha y Cumbe. Por último el sitio de Manachaqui, el más oriental de su investigación, ubicado a 3650 msnm en la vertiente oriental de los Andes, cuenta con una industria lítica original e inédita.
Hace más o menos 30 000 años, los hombres “modernos”, se difundieron por el mundo, eran cazadores-recolectores, nómadas, y dejaron huellas de sus pasos en : piedras talladas, huesos, a veces tumbas... que deben estudiar los arqueólogos hoy día para intentar reconstituir sus modos de vida, sus adaptaciones a diferentes medios ambientes, y entender mejor estos primeros pobladores, manifiesta Lodeho. Igualmente señala que a pesar de no dejar vestigios tan prestigiosos como los de las civilizaciones posteriores, como Moche, Chimú, o Inca, sus estudios son de suma importancia, especialmente para entender nuestros orígenes, y las bases de las sociedades recientes.
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