Al sonar la alarma y sirenas los regidores que se estaban reuniendo en la sala para la sesión de concejo, todos los empleados de las oficinas municipales evacuaron sus ambientes, al igual que los negocios cercanos, bancos y pobladores colindantes salieron a las calles en busca de su seguridad en los lugares señalados por defensa civil.
Castillo Ávila señaló que un movimiento telúrico de regular intensidad entre los 6 a 8 grados en la escala de Richter sería fatal para los pobladores que tienen sus viviendas de material rústico que son de adobes, caña y barro, así como otras no tienen columnas, vigas de concreto armado.
Por ello invocó a los moradores a mejorar las estructuras de sus casas para una mejor protección de las vidas humanas de sus familias.
Mientras el teniente alcalde Jorge Venegas Minchola sostuvo que en cumplimiento a la directiva de Defensa Civil Nacional se está haciendo el simulacro que permite evaluar la participación y los posibles daños que dejan los desastres. (Juan Alberto Lavado Ríos)
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