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sábado, 10 de diciembre de 2011

TRÁNSITO PEATONAL

Por: Alfredo Estrada Zavaleta.
set_aez@yahoo.es

La circulación por caminos rurales y vías urbanas, tiene una connotación diferente por su estructura y señales informativas para su uso, que los peatones deben observar y practicar en sinónimo de respeto a sus pares.
En la realidad de extensos terrenos o estrechos senderos, los caminos son de piedra y tierra; esencialmente, para conducir al ganado y habilitar el paso por acequias, en una función de emplear al máximo las zonas de cultivo y la conservación de éstos por razones del clima. Por ello, el número de usuarios es limitado y los grandes desplazamientos de gente, solo ocurren con motivo de la realización en algunas ferias patronales o reivindicaciones regionales.
Sin embargo, en el plano urbano y máxime en el metropolitano; las reglas de tránsito son diferentes y reflejan en si estilo de formación y educación ciudadana, conociendo las señales y la oportunidad del uso de las vías públicas. Por diversos medios y según la densidad poblacional de ciertas Urbes, se evitan conflictos y problemas entre los transeúntes y conductores de vehículos; simplemente, con las acciones racionales y la respectiva tolerancia, como: El caminar o trote ordenado por veredas amplias y cruceros bien definidos, el requerimiento del transporte en lugares apropiados y la ausencia de aglomeraciones en sitios de gran riesgo.
A pesar de esto y en forma particular, la existencia del Paseo peatonal de Pizarro; genera pues otra imagen y expectativa, en quienes se encuentran acostumbrados a divagar, a veces estorbando a aquellos que prefieren una senda ideal para la distracción, admirando los atractivos turísticos y el comercio de dicha zona. En ocasiones, el piso tiene rastros de chicle y otras sustancias, cuanto las fuentes son utilizadas para diferentes propósitos y fines. Sería interesante, que en nuestra principal arteria republicana; los transeúntes tuvieran la sensación de pasear, en mérito a sus actos reflejos y no sumidos en la condición del autómata con celular o aquel que pretende monopolizar todo el espacio, destinado a los peatones.
Tengamos por lo demás, una óptica más clara de lo que significa una vereda o un paseo peatonal; aunque, por decirlo menos, la mayoría de ella luzca con: Huecos, desniveles y ocupada por puestos de venta ambulante; que obligan ir en zigzag o bajar a la calzada. En cada situación habrá que elegir lo mejor, para no sufrir algún accidente con posterior fractura.