(RPP).- El consumo de agua de fuentes poco seguras y la disposición de excretas al aire libre facilitan la contaminación del agua y los alimentos. Los más afectados por la falta de agua, saneamiento e higiene son los niños, quienes contraen enfermedades diarreicas casi de inmediato.Más de un 70% de los casi 11 millones de muertes infantiles que se producen todos los años se deben a seis causas: la diarrea, el paludismo, las infecciones neonatales, la neumonía, el parto prematuro o la falta de oxígeno al nacer.
“La desnutrición y la falta de agua potable y saneamiento contribuyen a la mitad de todas estas muertes infantiles. Existe mucha relación en el tema de higiene, agua y saneamiento. Si en las casas no hay agua, los niños son los más afectados porque van a estar enfermos y eso no es calidad de vida”, indicó Mauricio Pardón, Director del Centro Panamericano de Ingeniería Sanitaria de la Organización Panamericana de la Salud.
De otro lado, se estima que los niños de zonas donde no se cuenta con agua y desagüe tienen entre 10 y 12 episodios de diarrea al año. Las enfermedades diarreicas son una de las principales determinantes de desnutrición crónica.
“Un millón de personas se abastecen de agua de cisternas, está bien que de alguna manera tengan agua, pero el consumo de agua segura es la que evita enfermedades infantiles, hay muchas maneras de purificar el agua y eso es lo que deben aplicar toda las familias”, señaló Pardón.
0 comentarios:
Publicar un comentario