Por Marcela García Guerrero
Estas son las contradicciones que a mi modesto entender realmente enervan. Esta mañana he presenciado el trato mas vejatorio, inhumano y totalmente carente de sensibilidad social para pacientes que en estado grave, acuden a su centro de salud, con todo derecho, para ser atendidos por la entidad a quien durante años han aportado mensualmente.
De esto se han ocupado reiteradamente los medios de comunicación, e inclusive han publicado fotografías, los pasillos de emergencia del hospital Lazarte por ejemplo, simplemente han colapsado, no se puede pasar, las camillas están en fila y todas están con un enfermos, los acompañantes como es lógico en estos tienen que estar de pie, o arre casi aplastados en las “ impecables” paredes del nosocomio. Señores ¿Qué pasó con el aporte de los afiliados? ¿ Qué pasó para que en las épocas en las que no teníamos este crecimiento del cual se enorgullecen el presidente actual y los anteriores, no tuviéramos la situación tan precaria y de país no ya del tercer mundo sino del extra mundo, como son ahora los hospitales?. Esto es inconcebible, no podemos por respeto a nuestros compatriotas callar ante una situación tan denigrante y delicada. Los Ministros de Salud tienen una gran responsabilidad, y los gobiernos Regionales deben levantar su voz de protesta. Es momento en que entren a tallar instituciones como la Defensoría del Pueblo entre otras, y también es momento de un pronunciamiento a nivel nacional, porque el hospital Lazarte no es el único ejemplo, en otras ciudades y en la capital es lo mismo. Compatriotas una cosa es leer en los periódicos y otra es visitar estos lugares, como seres humanos no podemos permitirlo.
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