Principal nosocomio de Trujillo pasa por una de sus peores emergencias, que ni los propios médicos pueden salvar.
Circular en el área de emergencia del Hospital Belén de Trujillo es toda una odisea. El lugar es estrecho, con muchas curvas que impide una movilización rápida. “Este espacio no es el adecuado, pues no podemos ni movernos”, nos dice Clara Fernández, quien aguarda la atención de uno de sus familiares en este nosocomio.
La situación se agrava y de eso conocen los trabajadores de uno de principales nosocomios de la provincia de Trujillo, que destacan la gran necesidad de contar con mayor recurso humano, equipamiento, mantenimiento y espacio físico. “Estamos colapsados, esto es el día a día de nuestro servicio, las camillas ya no nos alcanzan porque son ocupadas continuamente por pacientes que permanecen varios días en las zonas de los pasillos de emergencia porque están a la espera de camas de hospitalización” expresa Rosa Hernández Bracamonte jefa del departamento de emergencia y cuidado crítico.
Trabajos de hace cuatro años
A pesar de la delicada situación del Hospital Belén llamó la atención que el Gobierno Regional haya cancelado el mantenimiento de la atención de emergencia materno infantil, el cual se encontraba en proceso de contratación por un millón 397 mil 496.86 nuevos soles, para disponer de este presupuesto en la mejora de los techos de la oficinas de la sede central de la entidad gubernamental.
Los detalles de la suspensión la dio a conocer el consejero Dante Chávez Abanto, en la última sesión de consejo. “Nos dicen que no existe la necesidad, quiere decir que no hay enfermos, por eso ya no existe la necesidad, cuando esa posición es ilógica. La necesidad es mayor, no es a la inversa. Esta obra ha tenido su disponibilidad presupuestal y financiera. Se hizo mal en restarle importancia a la salud, pues cuando ganó César Acuña la presidencia regional se fanatizó que se priorizaría educación y salud”, dijo Chávez.
Fuente: Diario La Industria
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