viernes, 17 de abril de 2015

Cien días de ¿Soledad? por Marcela García Guerrero

Mas que de soledad yo diría de aprendizaje. Las políticas públicas es algo que muchos de nuestros políticos no las manejan, o no les dan la importancia respectiva, recién toman conciencia de ellas cuando están ya inmersos en lo operativo. No es fácil, como en todo, hay que prepararse para ser autoridad, hay que prepararse para saber liar con el estado, con su normatividad, con las políticas y sus protocolos. La carencia o la falta de formación en los partidos políticos hace que muchas de nuestras autoridades y las personas que trabajan con ellos no estén preparados en esta importante misión.Lo estamos viviendo en estos días, todos los medios de comunicación y la sociedad civil se han pronunciado sobre los logros y aciertos de los primeros cien días de las autoridades electas, es bueno que se haga, porque tenemos que saber cuales son las acciones prioritarias de nuestras autoridades, porque de su buena gestión depende la mejora de nuestra ciudad y región. Es bueno hacer las críticas respectivas, pero es mejor aún dar las propuestas a las mismas.Pensamos que hay un problema de fondo que lo repetimos cada vez que hay elecciones pero que no se soluciona, este es el caso de lo que vemos en mayor medida en el gobierno municipal por su inexperiencia en la gestión edil, pero también existe el problema en el gobierno regional. No sé desde cuando los gerentes pasaron a ser personal de confianza, a pesar de que según los entendidos ( debemos averiguar), existe una norma la cual señala que los gerentes deben ocupar sus puestos por meritocracia , es decir, por sus conocimientos técnicos y según su especialización lo que garantiza éxito en la gestión, sin embargo la práctica demuestra lo contrario, cambia la autoridad y cambian los gerentes, en una palabra se descabezan las instituciones y por ende hay una demora de varios meses hasta que se tome el ritmo de cada dependencia. Esto es un absurdo, quien pierde es la ciudad, quien pierde es la región. No nos rasguemos las vestiduras y nos quedemos en lo superficial es decir cómo fue la gestión en estos 100 días, es hora de que vayamos al fondo del problema, es hora de hacer cumplir las normatividades y si no las hay exigir que se reglamenten. No podemos darnos el lujo de que nuestras instituciones queden casi paralizadas los tres primeros meses. Esto lleva además, a clientelismos, a que muchos se sumen a los diversos movimientos o partidos porque aspiran a un cargo como recompensa.
Es hora de que nuestro país vaya asumiendo los problema de fondo, y se tiene que empezar por las normas, la carrera pública debe ser una de la más prestigiosa como lo es en otros países. El personal de confianza deben ser los asesores y quizás el gerente general, pero muy pocos más. Es increíble lo que hemos podido ver en estos meses, el gobernador Acuña por ejemplo parece que ha trasladado el municipio a la región, se ha marchado con toda la gente que trabajaba con él. Me pregunto, ¿han dado la información pertinente al gobierno entrante?, en dos meses que dura la trasferencia por supuesto que no ha habido tiempo de informarse de la situación real en la que se encuentra el municipio, luego vienen La sorpresas como la de los trabajadores impagos entre muchas otras.
Los ciudadanos no podemos seguir haciendo el juego que mejor acomode a los que ganaron las elecciones. Debemos exigir una reestructuración de la ley de partidos políticos, debemos exigir propuestas por resultados y debemos esperar que las autoridades pertinentes en grandes cabildos públicos nos den a conocer como van a hacer realidad sus planes de gobierno, de qué manera van a medir sus avances, la ciudadanía tiene derecho a saber, las autoridades tienen la obligación de informar, ya sea como se ha señalado y/ o visitando los diferentes gremios. Basta ya de tanta informalidad, esto beneficia la corrupción, y a no dar soluciones definitivas, ¿hasta cuándo?

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