Existe un alto porcentaje de niños con síndrome anémico en nuestra capital. Este, por lo general, se da por el escaso consumo de comidas con hierro. Por ello, para prevenir este mal, procure ingerir alimentos como carnes o sangrecita
(El Comercio).- En Lima, el 29,5% de niños de entre 6 meses y 5 años tiene anemia. En el Perú, esta cifra llega al 37,2%. Asimismo, el 21% de mujeres en el país sufre esta condición, según la última Encuesta Demográfica y de Salud Familiar del 2009, del Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI).
Estos datos revelan que la anemia es un problema importante para la salud de poblaciones vulnerables como las madres gestantes y los niños. La mejor manera de prevenirla es con una alimentación adecuada, rica en hierro. La Red Peruana de Alimentación y Nutrición (R-PAN) resalta la importancia del consumo de hierro de origen animal.
“Existen diferentes tipos de anemia, entre los que están las nutricionales. En este caso, la más frecuente y preocupante para la salud pública es la originada por la deficiencia de hierro de origen animal. Una alimentación saludable debe incluir alimentos ricos en este mineral, como la sangrecita el hígado de pollo, de vacuno o de cerdo; bazo, bofe, mollejitas, pescado, carnes rojas, morcillas, entre otros”, explica Faviola Jiménez, directora de la R-PAN.
Por su parte, Miluska Montalvo, nutricionista y docente de la Universidad Científica del Sur (Ucsur), señala que el hierro hemínico (origen animal) se absorbe mejor que el hierro no hemínico (origen vegetal).
“El hierro se presenta en dos formas: el ‘hierro heme’, presente en carnes, aves y pescados; y el ‘hierro no heme’, presente en vegetales. El primero se absorbe mejor y en mayor cantidad que el vegetal. Por ello, los alimentos ricos en fierro son principalmente de fuente animal”, dice Montalvo.
Una de las mejores fuentes de hierro es la carne –explica–, que tiene otras sustancias que facilitan la absorción de dicho mineral.
MAL FRECUENTE EN EL EMBARAZO
Según Sandra Franco, ginecóloga de la clínica Ricardo Palma, en el embarazo el volumen sanguíneo aumenta en un 45% (puede llegar al 80%). Dado que el aumento del volumen es mayor que el incremento de glóbulos rojos, se produce la llamada anemia fisiológica. Esta es la complicación más frecuente durante la gestación.
A partir de la decimoquinta semana se recomienda ingerir por vía oral, y en ayunas, una dosis de hierro. Este mineral aumenta el volumen de glóbulos rojos, y beneficia el desarrollo y crecimiento fetal y placentario. La madre debe consumir carnes rojas y vísceras, por lo menos dos veces por semana. La dieta de la gestante debe ser balanceada, rica en frutas, verduras y proteínas de origen animal y vegetal.
PARA TENER EN CUENTA
Faviola Jiménez, directora de la R-PAN, indica que el hierro en el organismo contribuye a la formación de la hemoglobina, proteína de los glóbulos rojos que permite transportar el oxígeno a los tejidos del cuerpo, ello fortalece la calidad de la sangre y aumenta la resistencia al estrés y las enfermedades.
Considere los alimentos que mejoran la absorción del hierro, como los cítricos: naranjas, limas, limones, mandarinas, cocona, camu camu, entre otros.
La sangrecita proporciona suficiente hierro para evitar la anemia. Es económica y diversas instituciones relacionadas con la salud y nutrición promueven su consumo, indica Miluska Montalvo, nutricionista de Ucsur.
(El Comercio).- En Lima, el 29,5% de niños de entre 6 meses y 5 años tiene anemia. En el Perú, esta cifra llega al 37,2%. Asimismo, el 21% de mujeres en el país sufre esta condición, según la última Encuesta Demográfica y de Salud Familiar del 2009, del Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI).
Estos datos revelan que la anemia es un problema importante para la salud de poblaciones vulnerables como las madres gestantes y los niños. La mejor manera de prevenirla es con una alimentación adecuada, rica en hierro. La Red Peruana de Alimentación y Nutrición (R-PAN) resalta la importancia del consumo de hierro de origen animal.
“Existen diferentes tipos de anemia, entre los que están las nutricionales. En este caso, la más frecuente y preocupante para la salud pública es la originada por la deficiencia de hierro de origen animal. Una alimentación saludable debe incluir alimentos ricos en este mineral, como la sangrecita el hígado de pollo, de vacuno o de cerdo; bazo, bofe, mollejitas, pescado, carnes rojas, morcillas, entre otros”, explica Faviola Jiménez, directora de la R-PAN.
Por su parte, Miluska Montalvo, nutricionista y docente de la Universidad Científica del Sur (Ucsur), señala que el hierro hemínico (origen animal) se absorbe mejor que el hierro no hemínico (origen vegetal).
“El hierro se presenta en dos formas: el ‘hierro heme’, presente en carnes, aves y pescados; y el ‘hierro no heme’, presente en vegetales. El primero se absorbe mejor y en mayor cantidad que el vegetal. Por ello, los alimentos ricos en fierro son principalmente de fuente animal”, dice Montalvo.
Una de las mejores fuentes de hierro es la carne –explica–, que tiene otras sustancias que facilitan la absorción de dicho mineral.
MAL FRECUENTE EN EL EMBARAZO
Según Sandra Franco, ginecóloga de la clínica Ricardo Palma, en el embarazo el volumen sanguíneo aumenta en un 45% (puede llegar al 80%). Dado que el aumento del volumen es mayor que el incremento de glóbulos rojos, se produce la llamada anemia fisiológica. Esta es la complicación más frecuente durante la gestación.
A partir de la decimoquinta semana se recomienda ingerir por vía oral, y en ayunas, una dosis de hierro. Este mineral aumenta el volumen de glóbulos rojos, y beneficia el desarrollo y crecimiento fetal y placentario. La madre debe consumir carnes rojas y vísceras, por lo menos dos veces por semana. La dieta de la gestante debe ser balanceada, rica en frutas, verduras y proteínas de origen animal y vegetal.
PARA TENER EN CUENTA
Faviola Jiménez, directora de la R-PAN, indica que el hierro en el organismo contribuye a la formación de la hemoglobina, proteína de los glóbulos rojos que permite transportar el oxígeno a los tejidos del cuerpo, ello fortalece la calidad de la sangre y aumenta la resistencia al estrés y las enfermedades.
Considere los alimentos que mejoran la absorción del hierro, como los cítricos: naranjas, limas, limones, mandarinas, cocona, camu camu, entre otros.
La sangrecita proporciona suficiente hierro para evitar la anemia. Es económica y diversas instituciones relacionadas con la salud y nutrición promueven su consumo, indica Miluska Montalvo, nutricionista de Ucsur.
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